P. MORENO Viernes, 17 septiembre 2021, 09:33 www.lasprovincias.es
El Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos ha denunciado que el servicio nocturno de la Unidad de UCOS en Valencia se ha visto mermado de un gran número de efectivos desde hace unos meses, quizás por la «falsa creencia de algunos de que pasado el toque de queda iba a continuar la calma nocturna en la ciudad. Nada más lejos de la realidad».
Para la entidad, una vez levantada esta restricción, las calles se han llenado de gente, produciéndose concentraciones masivas durante los fines de semana en diversas zonas de la ciudad, como puede ser en la plaza Honduras o en Blasco Ibáñez, donde el pasado fin de semana la multitud incluso llegó a cortar dos carriles de la avenida, aseguran.
«Durante toda esta semana, el servicio nocturno de la Unidad de UCOS ha sido destinado en su totalidad al control del botellón en la zona de la plaza Honduras y de la avenida Blasco Ibáñez, donde se concentran cada noche cientos de personas, mermando significativamente la atención de los servicios en otras zonas de la ciudad y sobrecargando de trabajo a las Unidades de Distrito, ya saturadas de por sí por la falta de personal generalizada en el Cuerpo de la Policía Local de Valencia«, denuncian.
Las mismas fuentes afirman que con la política llevada a cabo de «disminución del número de policías locales en el turno de la noche, actualmente en estas concentraciones masivas de gente es prácticamente imposible actuar ante las constantes infracciones a la normativa sanitaria o, simplemente, para atender las muy reclamaciones vecinales».
Comentan que los policías locales «en muchos casos, se sienten desamparados ante esta situación, puesto que no son suficientes para cubrir el servicio sin ver comprometida gravemente su seguridad e integridad física; además de la impotencia resultante de no poder llevar a cabo su trabajo por la falta de medios».
Durante la semana, la presencia de los agentes ha evitado en gran medida el botellón, pero el sindicato asegura que «no ha evitado el problema de orden público que se produce por la concentración de gente. Sin embargo, de cara al fin de semana, se prevé un aumento de personas en las calles, por lo que la presencia de unidades de intervención y respuesta de Policía Nacional en el lugar es indispensable para su control.
Por último, apuntan que por parte del Cuerpo «no se ha dado la formación necesaria a sus policías en aspectos de control de masas; se les manda ante multitudes sin ni siquiera haber sido instruidos en nociones básicas sobre la materia».
Desde el SPPLB reiteramos nuestra preocupación por toda esta situación que, aparte de repercutir en el bienestar de los vecinos de la ciudad, también provoca un riesgo real a la integridad física de los policías locales que cada noche se ven abocados a actuar en estas zonas sin los medios humanos y materiales necesarios y sin la formación adecuada para ello.
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