R. PAGÉS El nuevo plan de ajuste que prepara el gobierno local de Benidorm, del PSOE, será favorable para uno de los colectivos municipales que más ha alzado la voz contra los recortes salariales: la Policía Local. La dura presión ejercida por los agentes durante las últimas semanas y la necesidad de llegar a acuerdos con la oposición para poder sacar adelante dicho plan han forzado al ejecutivo de Agustín Navarro a recular en su pretensión inicial de rebajar al 50 por ciento los complementos de productividad de la Policía Local y a fijar la reducción en sólo un 15%, según avanzaron ayer a este diario fuentes de la corporación municipal.
Ésta es una de las pocas medidas que ha trascendido de las negociaciones que están llevando a cabo a tres bandas socialistas, populares y liberales de cara a la elaboración de este segundo plan de ajuste, que el Ayuntamiento tendrá que aprobar, como muy tarde, el próximo viernes. En él, el ejecutivo de Navarro también deberá aplicar un requisito exigido desde el primer día por los dos grupos de la oposición si quiere sacar adelante el plan en esta segunda ronda. Éste no es otro que no subir el IBI más allá del incremento del 10 por ciento que se empezará a aplicar este año por orden del Gobierno central. Por tanto, la concejal de Hacienda, Natalia Guijarro, y los técnicos municipales del área económica deberán buscar alternativas para la generación de nuevos ingresos, al margen de la de incrementar este impuesto en un 31% a partir de 2014, como preveían en el primer plan que fue rechazado el pasado marzo por PP y CDL.

Según la información a la que ha tenido acceso este diario, en principio, los grupos políticos tendrían cerrado ya un acuerdo para aminorar la rebaja de los complementos de productividad prevista para la Policía Local. De aprobarse definitivamente, este colectivo no dejaría de percibir la mitad de los cerca de 300 euros mensuales que cobra por asistencia, sino sólo unos 45 euros al mes o, lo que es lo mismo, un 15%, la misma cuantía que el gobierno tenía previsto aplicar al resto de funcionarios que cobran pluses. Además, según indicaron las mismas fuentes, tampoco se aplicaría la tijera a la remuneración que ingresan los agentes de la Policía por realizar servicios extraordinarios, como cobertura de la seguridad en conciertos, fiestas o eventos deportivos, y por los que perciben otros 290 euros al mes. Ni tampoco cambiarán el sistema de nocturnidad que se aplicaba hasta ahora, por lo que los policías seguirían cobrando este complemento por mes y no por noche real trabajada, como preveía el primer plan elevado a pleno por el PSOE.

¿El final del conflicto?
La duda ahora es saber si la marcha atrás del ejecutivo de Agustín Navarro en este asunto pone fin de una vez al conflicto que el colectivo de la Policía tiene abierto con el gobierno local desde hace más de medio año y que en los últimos meses se ha recrudecido, con numerosas protestas fuera y dentro del Ayuntamiento contra el recorte salarial. Los agentes, incluso, llegaron a invadir el Consistorio y a renunciar a cubrir los servicios extraordinarios que realizan para cubrir el déficit de agentes que arrastra la plantilla policial, lo que podría causar serias complicaciones en la ciudad, sobre todo en los meses de verano.