El alcalde de Benidorm, Agustín Navarro, continúa presionando a la plantilla de la Policía Local, cuyos 240 miembros han decidido renunciar voluntariamente al cobro del plus de productividad (que supone cerca de 250 euros mensuales) y a prestar servicios extraordinarios, para que el Ayuntamiento pueda ahorrar un millón y medio de euros al año.
Todos los agentes municipales de Benidorm recibieron ayer en sus teléfonos móviles un mensaje SMS, remitido por la Jefatura de la Policía Local, en el que se les advertía sobre las bajas laborales injustificadas. Tan solo unas horas después esta directriz, cuya legalidad había sido cuestionada por los sindicatos, era anulada por el mismo procedimiento: con un SMS.
El texto del primer mensaje recibido era el siguiente: «Siguiendo indicaciones de personal, la falta al trabajo aunque sea por un día se deberá justificar un un parte de baja, y nunca con un simple informe médico, debiendo traer igualmente el parte de alta al volver al trabajo (sic)».
Las fuentes sindicales consultadas por ABC indicaron que esta directriz podría ser contraria a la normativa laboral estatal e incluso ser contraproducente para el Ayuntamiento, pues podría prolongar la duración de las bajas médicas hasta que el agente logre el posterior parte de alta.
Unas horas después, los agentes recibieron un nuevo mensaje en sus teléfonos móviles, también firmado por la Jefatura de la Policía Local, que anulaba el anterior: «En relación con el comunicado relativo a la falta al trabajo enviado esta mañana, queda anulado el mismo hasta nuevas indicaciones», reza el mensaje SMS, tal como pudo constatar ayer ABC.