NOTA DE PRENSA
“ESPERANDO A LOS BOMBEROS...”
Desde el SPPLB llevamos meses recogiendo testimonios y datos de servicios reales prestados por el Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia (CPBV) y la conclusión a la que lamentablemente hemos llegado y así hemos transmitido varias veces a la Dirección, es que estamos viviendo situaciones graves que comprometen la SEGURIDAD de los ciudadanos y de los propios bomberos.
Este lunes, un bombero del CPBV, ha sufrido una caída lesionándose de gravedad en un pie mientras entrenaba técnicas de rescate vertical. Debido a lo complicado de su lesión y a lo inaccesible de la zona, ha sido necesario rescatarle.
A pesar de que otro bombero que estaba con él dio aviso al 112 y al oficial de guardia del CPBV, le hubiera valido la pena llamar directamente a otros compañeros para que lo rescatasen. El nefasto rescate que ha tenido que sufrir este compañero, se inició con esa llamada. Además de no ser atendido por bomberos profesionales, la ineficacia e improvisación de la Dirección, provocó que en lugar de enviarle una camilla adecuada, tuviera que ser rescatado con una camilla deteriorada y fuera de servicio que pudo conducirle a una caída al vacio y con ella la muerte (cuando el CPBV dispone de camillas adecuadas para este tipo de servicios abandonadas en todos los parques desde hace años, hecho que hemos denunciado varias veces) y si eso no es suficiente, de los 5 bomberos voluntarios que debían acudir a la emergencia, acudió SOLO UNO, cosa que JAMÁS hubiera ocurrido si se hubiera movilizado un parque de bomberos profesionales.
La gestión fue tan nefasta que el herido tuvo que esperar durante horas para recibir los cuidados necesarios y tuvo que ser evacuado con medios de fortuna improvisados por su compañero, para ser intervenido posteriormente en el Hospital.
Estamos seguros que la indignación por el servicio recibido de cualquier ciudadano hubiera sido enorme, pero en la piel de un compañero, que conoce lo que se podía y debía haber hecho, la sensación es todavía mayor.
Resulta indiscutible que la profesionalidad en cualquier ámbito es garantía de una buena atención al ciudadano y que un cuerpo tan esencial como los bomberos, no puede ni debe depender de voluntarios ni de personal que no cumple unos requisitos mínimos de conocimientos ni medios. Ser BOMBERO no es coger una manguera y tirar agua, los bomberos de verdad, los que pueden resolver las emergencias de la mejor manera, somos los bomberos profesionales, los que estamos entrenados y formados para dar las máximas garantías en nuestro trabajo, para poder atender las emergencias y a los ciudadanos como se merecen. Pero para poder hacer bien nuestro trabajo, no vale con nuestra vocación y voluntad, necesitamos inversión económica, material, personal, y sobre todo, que nuestro servicio esté dirigido por profesionales competentes que se preocupen por el servicio y por los bomberos profesionales, que los hay, pero lamentablemente son minoría.
Tener aficionados “haciendo de bombero” además de una negligencia y un timo a la sociedad, es una cuestión flagrante de intrusismo profesional, la consecuencia directa para los valencianos a raíz de la Ley de los SPEIS elaborada por la Consellería, es que como usuarios, sufren mayores y peores consecuencias y secuelas cuando sufren un accidente, un siniestro o un incendio, de los que sufrirían si fueran atendidos de forma correcta por los bomberos profesionales.
¿Cómo se sentiría cualquier persona en la piel de nuestro compañero accidentado, al ver que después de horas de espera llega a rescatarle un solo bombero, con una camilla fuera de servicio y sin medios sanitarios? INDIGNACIÓN, RABIA Y DECEPCIÓN
El CPBV, tiene dos grandes problemas:
-El estrangulamiento económico que sufre el CPBV por parte de la Generalitat Valencia, que acumula sus impagos año tras año y que repercute en un deterioro continuo del personal,instalaciones, vehículos, formación, etc...
-Las nefastas y peligrosas políticas de dirección técnica y gestión que está realizando la dirección de este servicio, que permiten y fomentan que emergencias en las que hay víctimas afectadas, sean atendidas por dotaciones compuestas por bomberos voluntarios, protección civil y otros servicios, gente con mucha voluntad, pero sin la formación ni capacitación de un bombero profesional. Se añade además, que se incumple la ley 7/11 (ley de bomberos de la C.V.) en la que se establecen equipos especiales profesionales para asistir en este tipo de rescates.
No hace 2 semanas que el SPPLB se volvió a quejar oficialmente de estas prácticas, en las que no se movilizan los medios adecuados, la dirección nuevamente hace caso omiso, incumpliendo sus obligaciones de dar un servicio esencial de forma efectiva, y uno de nuestros compañeros ha tenido que sufrir su incompetencia. Con esta Dirección hay ciudadanos de primera y de segunda a la hora de ser rescatados y auxiliados y no hay derecho, ni se puede permitir.
Por todo ello, tratando de evitar que nadie más tenga que sufrir una pésima atención por parte de un servicio tan básico y profesional como este y siendo que no es la primera vez que ocurren hechos similares sin que la Dirección del Consorcio tome ninguna medida correctora, el SPPLB ha exigido oficialmente que se movilicen siempre bomberos profesionales independientemente de que se pida apoyo a los bomberos voluntarios o brigadistas. También hemos exigido que se investiguen los hechos y se tomen las medidas oportunas. Mientras tanto estamos valorando si interponer una demanda judicial por tan nefasta actuación.
DIEGO ORTEGA DÍEZ SECRETARIO LOCAL DEL SPPLB-CV
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