LORENA GIL LÓPEZ

El Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB) denunció ayer que los agentes en Mutxamel utilizan material de defensa caducado, no cuentan con el equipamiento mínimo adecuado y se incumplen los servicios de personal.
Fuentes del sindicato afirmaron que hay policías motoristas que carecen de guantes de moto y sus cascos son prestados por otros compañeros, al tiempo que no tienen auriculares para las trasmisiones, por lo que en ocasiones "han de soltar una mano del manillar para escuchar mejor o trasmitir comunicados".
Otras de las quejas hacen referencia a la utilización de material de defensa caducado, como los spray de autodefensa y los chalecos antibalas, que además "son insuficientes y no cubren en ocasiones a todo el personal de turno", según las mismas fuentes.
El SPPLB también alertó de que parte de la plantilla carece de guantes anticortes, "lo que ocasiona un peligro a la hora de cacheos o detenciones", y de chubasqueros e incluso a los agentes más nuevos no se les dota de toda la uniformidad reglamentaria, "teniendo que utilizar los que llegados por motivos de movilidad la de otras poblaciones, siendo esta distinta en diseño, materiales, colores, etcétera".
El sindicato hizo una mención aparte a la diferencia entre el material que tienen los agentes y los mandos, como los inspectores y el intendente. Así, criticó que los grilletes de los mandos "son distintos, de mayor calidad y precio", a los entregados a los agentes, los cuales en muchas ocasiones "son de segunda mano al darse los entregados por agentes que abandonan la plantilla".

Armas de fuego
Asimismo, las armas de fuego de los inspectores y el intendente son distintas a la del resto de la plantilla y el uniforme del intendente es de distinta calidad y tejidos, "siendo mejor al del resto de la plantilla".
Con respecto a los servicios mínimos de personal establecidos por el ayuntamiento mutxamelero, "en muchas ocasiones no se cumplen", de modo que en el turno de noche solamente hay dos personas de servicio, una en la central y otra patrullando en la calle, cuando el servicio mínimo dice que debe haber al menos cuatro.
Por lo que respecta al turno de tarde, también se ha dado el caso de haber tres agentes, una en central y dos patrullando, cuando el servicio mínimo tienen que ser cinco personas. "Cuando se ha dado este tipo de casos, se ha intentado contactar con el intendente jefe, pero no contesta la llamada, aunque tenga la dedicación exclusiva", explicaron las mismas fuentes.
Por último, el sindicato resaltó que a estas carencias de los equipos y del material caducado hay que unir "la presión y persecución a la que somete el intendente jefe a muchos policías a base de expedientes disciplinarios no justificados en su mayoría, para acallar las críticas a su mala gestión". En estos momentos, según el SPPLB, hay más de una decena de expedientes abiertos.
Por su parte, el alcalde de Mutxamel, el popular Sebastián Cañadas, declinó hacer declaraciones sobre estas denuncias.

Sobrecarga de tiempo y dedicación a la planta de basuras
El SPPLB también denunció carencias y malestar en El Campello, donde recordó la falta de refuerzos para la Policía Local el pasado verano, que provocó una "saturación" de trabajo.
El sindicato indicó que se incorporó un agente interino en septiembre y otro en octubre "por la dejadez del servicio de Recursos Humanos" y que hubo una patrulla menos en la calle que el año pasado "y no se pudo atender todos los servicios policiales requeridos".
También reiteró la "sobrecarga de dedicación y tiempo" a los olores de la planta de basuras, "ordenada por la Alcaldía", mediante los controles de los camiones que acceden al vertedero y la asistencia al lugar de las quejas de hedores por parte de los vecinos, "cuando es evidente que no es un tema de solución policial", según fuentes del sindicato.