El Sindicato de Policías y Bomberos de Valencia (SPPLB) criticó ayer que el ayuntamiento cierre el parque del Oeste con motivo de la apertura -prevista para el verano- del parque de bomberos del centro histórico.
Fuentes del sindicato indicaron que, aunque no están en contra de la apertura de un nuevo servicio, su ubicación, en la calle Alta, «deja mucho que desear porque hace mucho más difícil el acceso al centro histórico que si se accede desde fuera».
Para el SPPLB, el parque del Oeste, ubicado en la calle Músico Ayllón, es de los que más servicios realiza. «Su cierre hará que se atienda peor a una de las zonas de más concentración de siniestros de la ciudad y se verá afectado el tiempo de respuesta, por lo que los perjudicados serán los vecinos», indicaron.
Asimismo, recordaron que actualmente la ciudad cuenta con seis parques de bomberos frente a los siete que figuran oficialmente porque el que está ubicado en El Saler «técnicamente es un retén y no se utiliza por bomberos al no disponer de personal suficiente». También lamentaron las más de 200 plazas vacantes de bomberos «que se han destruido».
Ante esta denuncia, el concejal de Seguridad Ciudadana, Miquel Domínguez, confirmó que «se está estudiando» la clausura del parque del Oeste porque, aunque se hizo una reforma, «es un parque que no reúne las condiciones». Si finalmente se procediera al cierre, su zona estaría cubierta «perfectamente» por el parque de Campanar.
Respecto a la operatividad del parque del Oeste, el concejal desmintió al sindicato indicando que «es el más pequeño y apenas se utiliza porque está obsoleto», pues data de los años 70. A su juicio, «el problema de este sindicato al rechazar ese posible cierre no es técnico, es que puede haber personal acostumbrado a tener cerca su lugar de trabajo y que no le sea tan cómodo tener que cambiarse a otro lugar».
Domínguez también señaló que el nuevo parque de Ciutat Vella «es una larga reivindicación de los bomberos» y que está adaptado al entorno del centro histórico.