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PRENSA

VALENCIA: Vecinos del Carmen exigen intensificar las multas para evitar nuevos macrobotellones

03 noviembre 2011 915 visitas

Lasprovincias.es Jueves, 3 noviembre 2011

Multas masivas para atajar de raíz el macrobotellón que se forma cada año la noche de Halloween en las calles del centro histórico. Esa es la petición de la asociación de vecinos del Carmen, cuyo portavoz, Miguel Wiergo, aseguró que es la única manera de cortar de raíz una tradición anglosajona que se ha implantado en Valencia de la peor manera posible.
Los servicios de limpieza recogieron algo más de ocho toneladas de basura la mañana del martes, con un coste de 24.500 euros en un dispositivo para el que hicieron falta 80 empleados de la contrata.
Wiergo estimó que las «medidas disciplinarias» son el único cauce posible para eliminar el macrobotellón a corto plazo. «Cuando lleguen las multas a sus casas, entonces los papás se darán cuenta de lo que hacen sus hijos».
Este año, las previsiones se quedaron cortas y la madrugada del martes fue como un «día de Fallas; había calles por donde no se podía pasar, ni siquiera las ambulancias». Por ese motivo, la entidad vecinal pedirá al Ayuntamiento que convoque la Junta de Seguridad de Ciutat Vella, donde se acuerden las medidas para la noche de difuntos del próximo año.
«La gente no se fue hasta las siete de la mañana. Además, no se cortaban en absoluto, orinando y defecando en los portales de nuestras casas». La Policía Local, para evitar lo que ocurrió el pasado año, cortó los accesos a la plaza de la Virgen, aunque no fue suficiente. Sin ir más lejos, la cercana plaza de la Reina congregó a miles de personas.
Wiergo criticó que en la última Junta de Seguridad no pudieron participar, debido a que no forman parte de la Federación de Vecinos. «La presidenta vecinal, María José Broseta, no quiso que entrásemos. Ahora la pedimos nosotros pero puede venir el que quiera».
El servicio nocturno de la Policía Local se reforzó con apenas una decena de agentes más, según denunció Jesús Santos, secretario del Sindicato de Policías Locales y Bomberos (SPPLB) en la sección del Ayuntamiento.
Santos consideró esta cifra «claramente insuficiente» ante la avalancha de personas que estuvo hasta primeras horas de la mañana del día 1 haciendo botellón. «Fue como un día de Fallas o aún peor», aseguró, antes de vincular esta escasez de personal con la plantilla del Cuerpo. El comité de empresa del Consistorio ha pedido un refuerzo de 300 agentes más en los próximos años, con la oferta de otras tantas plazas en oposiciones.
«Esto es un anuncio de lo que vendrá. Falta gente para cubrir todos los servicios», criticó Santos, para asegurar que en Bomberos están recurriendo a los «servicios estraordinarios de manera obligada, lo que sólo sucede en casos de gran magnitud de necesidad».
Santos añadió que las protestas de las últimas semanas y el trabajo a reglamento «no es sólo por los atrasos, está claro que cobraremos porque está consignado. Protestamos porque faltan agentes».
El servicio nocturno de la Policía Local ronda el centenar de personas, aseguraron fuentes cercanas al gobierno municipal. «Contamos en el operativo con el apoyo de la Policía Nacional, además de tener la ciudad cubierta con los retenes de cada distrito».
Las mismas fuentes aseguraron que se produjo una gran cantidad de decomisos de bebidas alcohólicas. «Se han levantado al menos medio centenar de actas», junto con media docena de sanciones por ruidos y otras por consumo de alcohol en la calle.
Sobre la cifra de agentes, consideraron que fueron «suficientes» y que también se aplicaron controles de velocidad y consumo de alcohol en la ronda de bulevares, com una medida añadida, aunque la mayoría de participantes en el macrobotellón fueron menores.
El dispositivo conjunto fue similar al que se realiza cada semana en el campus de Tarongers, aunque la afluencia de público hizo que todo quedase desbordado. Wiergo comentó que el tráfico debería haberse cortado en todo el perímetro. «Lo hacen los fines de semana para perjudicar a los vecinos y en esta ocasión han pasado del tema», para criticar el olvido del barrio. «El Carmen es de usar y tirar», apostilló