DOS POLICIAS LOCALES AGREDIDOS EN EL BARRIO DE VELLUTERS

Valencia

Dos policías sufren la segunda agresión en Velluters en una semana

Un traficante que vendía coca y heroína golpeó a los agentes en la calle y uno de ellos está de baja a causa de las heridas

20.08.10 - 00:43 -

M. J. CARCHANO | VALENCIA.

La mujer agredida por una prostituta tiene que llevar collarín por las lesiones sufridas

092. Son las 22.15 horas del pasado martes y una llamada al número de la Policía Local avisa de que hay dos personas de raza negra vendiendo droga en el cruce de la plaza Escuelas Pías con la calle Balmes, en el barrio de Velluters. Acuden dos agentes y comprueban la veracidad de la alerta.

Pero los policías no se esperaban que, al proceder a la detención de los dos individuos por tráfico de drogas, ofrecieran resistencia. Según fuentes cercanas al gobierno municipal, uno de ellos fue detenido sin problemas, pero el segundo se revolvió cuando intentaron ponerle las esposas y agredió a los dos agentes. Aunque ninguno requirió asistencia médica, un policía está de baja después de resentirse de los golpes propinados por el presunto traficante.

Estas mismas fuentes confirmaron que los detenidos están acusados de «agresión y lesiones a la autoridad y de tráfico de drogas». En este sentido, se les incautaron 19 bolas de heroína y cocaína que llevaban escondidas, y que estaban vendiendo antes de que llegaran los agentes.

Esta es la segunda agresión que se produce en el barrio en dos días. Si el lunes fue una vecina de Velluters, María, la persona que requirió asistencia médica después de que una mujer la agrediera en plena calle, el martes por la noche fueron los dos agentes. Precisamente, la víctima, que forma parte de la asociación de vecinos El Palleter, denunciaba en ese momento ante los medios de comunicación la situación de inseguridad que se vive en el barrio cuando la insultaron y agredieron. De momento, la agresora todavía no ha sido detenida, ya que huyó de la zona en taxi, perseguida por algunos testigos.

LAS PROVINCIAS ya denunció el pasado domingo la existencia de prostitución y tráfico de drogas que rodean las nuevas viviendas de protección pública del barrio y el malestar de los nuevos residentes, que reivindican mayor presencia policial para «poder caminar tranquilos por la calle», como dice María José Volta, secretaria de la asociación de vecinos El Palleter.

Desde el pasado lunes, los agentes del barrio están más pendientes de cualquier aviso y se ve mayor presencia policial por los alrededores de la calle Guillem Soro- lla, donde los vecinos se quejan de la presencia constante de drogadictos y prostitutas. Según algunas fuentes consultadas, en verano se detecta mayor presencia de meretrices por el centro, desalojados de la zona marítima, a la que suelen volver pasados los meses estivales.

Barrio chino

Durante todo el día se puede observar cómo en la calle Viana hay un trasiego continuo de prostitutas y de clientes. Según uno de los vecinos, Fernando, aprovechan las horas de relevo policial para incrementar la actividad de venta de estupefacientes.

La empresa municipal Aumsa quiso, con la construcción de viviendas en régimen de alquiler, revitalizar el que fuera conocido como el barrio chino, y donde durante años la prostitución y las drogas se habían adueñado de las calles. Muchos vecinos denuncian que la situación no ha cambiado, que el barrio es todavía peligroso, aunque los comerciantes creen que la continua presencia policial convierte la zona en tranquila.

Ayer por la mañana, hasta tres patrullas de la Policía Local estaban estacionadas en el jardín de la calle Guillem Sorolla, vigilando que no haya más altercados como el del lunes. «Mientras estén por la zona estoy muy tranquila», decía ayer María, la vecina agredida, que todavía tiene que llevar un collarín por las lesiones sufridas.